Apostolados

Virgen Peregrina

 

La Campaña de la Virgen Peregrina nació en un marco histórico de Schoenstatt muy especifico: el 31 de mayo de 1949 y los viajes internacionales del Padre Kentenich.
La Campaña es una respuesta a los anhelos que movieron al Padre Kentenich: el deseo de tener aliados para la misión, de expandir y popularizar la Alianza de Amor, de complementar y enriquecer Schoenstatt a través de un gran movimiento popular de peregrinos y de vivir el organismo de vínculos a lugares, personas, valores, a una misión.
La Campaña es una nueva Visitación de María a nuestros tiempos. María se pone en camino urgida: “Surgió María y se encaminó presurosa”.
Ella se encamina a las familias para llevar tres regalos que el hombre de hoy necesita: la alegría, la persona de Jesús, una ayuda concreta en servicio al hombre, a todo el hombre, a todos los hombres y en todas las circunstancias.
La Campaña es una misión inserta en la Iglesia, un camino moderno de pastoral, que tiene como fin específico la evangelización de las familias.
Se trata de un apostolado que va al encuentro de todos, promoviendo los valores cristianos. La fuerza de irradiación de la Campaña radica en que, partiendo del Santuario, fuente de gracias, llega al pueblo para socorrerlo en sus necesidades y preocupaciones.Responde así a:
La sed de Dios que tiene el hombre.
La necesidad de sentirse hijo ante Dios.
La necesidad de expresar la fe con gestos concretosSiendo simple está al alcance de todos. Tiene como soporte una espiritualidad sólida y una pedagogía eficiente, que lleva a concretar la gran proclama de la Nueva Evangelización.
Cuenta con una organización ágil, que lleva a aquellos que portan la imagen y a los que la reciben a sentirse hermanados y a formar verdaderas comunidades de base. Lo específico de la Campaña es la visita regular de la Madre tres veces Admirable de Schoenstatt a las familias, a las escuelas y a los hospitales, acompañadas del Rosario, rezado y vivido, y de la consagración del corazón a la Virgen
El Padre Kentenich avaló la tarea de don Joao, iniciador de la Campaña, cuando dijo: “En el trabajo del señor Pozzobon, todas las fuerzas fundamentales de Schoenstatt se tornan eficaces”.
De esta manera se trata de actualizar tres escenas bíblicas: la de la cruz, cuando San Juan recibe a María por Madre y la lleva a su casa; la de la Visitación, también hoy María visita los hogares; y el Cenáculo, porque unidos en oración con María, la Madre de Jesús, los cristianos esperan las fuerzas del Espíritu para ser apóstoles en el mundo. Ella es “la gran Misionera, Ella obrará milagros” (San Vicente Pallotti), transformando y comprometiendo a sus hijos con el Evangelio de Jesús.
Corresponde al espíritu de la Campaña cultivar un estrecho contacto y colaboración con las parroquias, ya que el párroco puede contar con un medio evangelizador que acerca a las familias, promueve la vida sacramental y colabora para que la parroquia sea “comunidad de comunidades y de movimientos” (Documento de Santo Domingo, 58).La Campaña consiste en llevar la imagen de nuestra Señora de Schoenstatt:
Desde el Santuario y unidos a él,
a muchos hombres, especialmente a las familias,
en el espíritu de don Joao Pozzobon y a ejemplo suyo,
para que, por medio del Rosario,
la Alianza de Amor y la Adoración Eucarística,
para que la Santísima Virgen pueda actuar como la gran Misionera,
al servicio de la renovación de las familias, de la Iglesia y de la sociedad.

Las distintas modalidades – como peregrina de cárceles, de no-videntes, de la serenidad, para bebes en riesgo de vida, de niños… -, son una respuesta creadora a las necesidades concretos. Las imágenes Auxiliares, surgidas por una iniciativa de Joao Pozzobon, son replicas exactas de la Peregrina Original. Ellas parten del Santuario de Santa Maria, Brasil, y vinculan a la Campaña con el fuente del origen. Presiden las peregrinaciones y eventos especiales en las diócesis.

LA HISTORIA DE LA CAMPAÑA
Esta “Campaña” -como le gustaba llamarla a Joao Pozzobon- tuvo un inicio modesto, como todas las cosas de Dios.  Comenzó en el año 1950, cuando una Hermana de María le entregó a Joao Pozzobon, miembro del Movimiento de Schoenstatt de Brasil, una imagen de la Madre tres veces Admirable de Schoenstatt, pidiéndole que la llevara a las familias para rezar con ellas el Rosario. Joao Pozzobon, que asumió esta tarea y la hizo suya durante treinta y cinco años y hasta el día de su muerte, caminó más de 140.000 Km. con la imagen. La llevó a hogares, hospitales, escuelas y cárceles, e incentivó en todas partes la vinculación a la Virgen y al rezo del Rosario. En 1979, Joao Pozzobon visitó Schoenstatt en Alemania, lugar de origen de la devoción de la Madre tres veces Admirable. De allí siguió a Roma, en donde Juan Pablo II bendijo la imagen de la Madre Peregrina, y en ella también su apostolado. A partir de 1984, los argentinos comenzaron a conocerla y a comprometerse con ella. Un rol fundamental en la difusión de la Campaña como en la reflexión de la misma, tuvo el Padre Esteban Uriburu, que lo hice la misión de su vida. Hoy en día, la Campaña está presente en unos 110 paises del mundo, acercando las gracias del Santuario a varios millones de personas. La ciudad de Santa María se convirtió así en cuna de una iniciativa original. Después de la muerte de don Joao, el 27 de junio de 1985, la Peregrina Original, aquella que él portaba en sus hombros, se encuentra en la casa del Movimiento, en Santa María.

 

LA VIRGEN PEREGRINA EN MÉXICO
La Campaña de la Virgen peregrina está extendida por casi toda la República. Se ha desarrollado con fuerza ya desde los años ’80. Hoy existen alrededor de 3000 imágenes peregrinando en todos los estados. Para más datos: virpemexico@gmail.com

 

EL OBJETIVO DE LA CAMPAÑA
Don Joao vivió en su vida el “Sí” de María. Vivió sencillo y humilde, totalmente dedicado a su familia, a Schoenstatt y a la misión mariana. Gracias a su fidelidad, miles de familias del mundo entero reciben hoy la imagen peregrina, se unen en oración, descubren mejor a Jesús y gozan de las gracias del Santuario de Schoenstatt. Joao Pozzobon expresó el objetivo de la Campaña en tres puntos principales: “Salvar la familia por medio de la gran Obra de Schoenstatt…” Encuentro con la Santísima Virgen. “Encuentro con Jesucristo, su Hijo, y con Dios Trino…”

 

EL POTENCIAL DE LA CAMPAÑA DEPENDE DEL MISIONERO
El P. Alberto Eronti, que vivió varios años en Roma,  en el año 2002  en el contexto de una presentación de la Campaña, destaca “la gran posibilidad que nos brinda la Campaña de la Virgen Peregrina. No hemos de ver la Campaña como una práctica devocional, sino como un privilegiado medio y método de evangelización y transformación de las familias. La última acción creadora de María en lo que hace a los Santuarios, se da en y desde el corazón de un hijo del Padre Kentenich, el diácono brasilero Joao Luis Pozzobon. Esposo, padre y de profesión comerciante, este hombre se constituye en un instrumento excepcional de la Madre tres veces Admirable. En 1950 él recibe de parte de la Hna Teresinha – Hermana de María- una imagen de la Virgen de Schoenstatt en un marco de madera con forma de Santuario, pidiéndole que “la haga peregrinar”. Ahí se inicia una verdadera epopeya de un hombre con corazón de niño y de un ardiente amor a María y a la Obra de Schoenstatt. Con él nace lo que hoy se llama “La Campaña del Rosario de la Virgen Peregrina de Schoenstatt”. De esta iniciativa dirá el Padre Kentenich que se “trata de la pastoral del futuro”, pastoral que realiza la novedad de la Iglesia pos-conciliar, “la pastoral de la búsqueda”, esto es: la Iglesia va en busca de los hombres, entra en sus casas, fábricas, oficinas, etc., y les ofrece el don de la Salvación. Desde que recibió la imagen de la Virgen, el diácono Pozzobon caminó más de 140.000 kilómetros por el estado de Río Grande do Sul. ¡Toda una epopeya de fe!, la “pastoral del futuro” es ya “pastoral del presente”. ¿Cuál es la “dinámica” de esta pastoral? María “sale” de sus Santuarios para ir al encuentro de sus hijos. Es llevada por un “misionero” o “misionera” y entra en las casas, se deja colocar en un lugar destacado y queda ahí uno o dos días. Así, cada imagen “visita” 15 o 30 familias al mes, para recomenzar con las mismas al mes siguiente y así una y otra vez, por meses o años. Se trata de lo que hemos llamado “la nueva Visitación”.

 

LA “PRIMERA EVANGELIZADORA”
María “sale presurosa” para visitar a sus hijos, llevándoles la alegría y la santidad del Espíritu y de su Hijo. Ella, como hace 2000 años, se constituye en la “primera evangelizadora”. Cada imagen va acompañada de un rosario – uno de los tres elementos centrales de la Campaña – y de un cuaderno donde los miembros de la familia escriben aquello que le piden a su Madre o que la Madre les regaló en su visita. Estos cuadernos son testigos de las innumerables gracias que la visita de María regala a las familias. Pero no sólo María visita a los hogares, Ella invita a sus hijos a visitarla en su Casa, que es el Santuario diocesano o nacional. Se produce aquí lo que hemos llamado “el circuito mariano” de la Campaña: María sale del Santuario y los hijos la visitan en su Santuario. Esto se da en un ciclo mensual -todos los 18 de cada mes se invita a las familias a visitar a la Virgen- y en un ciclo anual: el gran encuentro de las familias y de las imágenes en el Santuario. Esta dinámica pastoral tuvo, posteriormente, otros matices o logros: surgieron las imágenes que “visitan” las cárceles, las que visitan hospitales, las que visitan las universidades y los colegios (esta visita dura generalmente cuatro o seis meses intensivos), las imágenes de los niños, que tienen forma más pequeña y que suelen ser de dos o tres meses unidos a la Navidad, de los ciegos, los taxistas, los bebés en riesgo, los comercios, geriátricos. El Padre Kentenich decía, refiriéndose a lo “pentecostal” del actuar de la Virgen y su Obra: “Un Movimiento de renovación aspira a ser y debe ser un movimiento de gracias, un terremoto de gracias”. Esto es lo que hemos experimentado con la Campaña de la Virgen Peregrina: una enorme irrupción de gracias, una multitudinaria irrupción de gracias. María es la que, con sus instrumentos, alienta y sostiene la Iglesia Familia. La Campaña está en los cinco Continentes. Hemos constatado que es un “método” que funciona en todas las culturas y estratos sociales. Por ejemplo, cuando la Campaña llegó a USA, alguien dijo: “Esto aquí no va a funcionar, no es Latinoamérica”, Sin embargo funcionó. Cuando llegó a Alemania dijeron lo mismo, pero funciona. En África Central, se dijo lo mismo y funciona. Esto se ha constituido para nuestro Movimiento de Schoenstatt en una gozosa y feliz experiencia pastoral. Con ella hemos alcanzado todos los niveles sociales y llegamos a todas las culturas. Es la experiencia de María y la Iglesia por los caminos del hombre buscando y amando a todos.
LOS MISIONEROS

Los misioneros de la Virgen Peregrina reciben una formación permanente según su ámbito social y cultural. Se trata no en primer lugar de una formación intelectual, sino de que tengan la conciencia y la alegría de ser instrumentos en las manos de María. Ellos han de ser los ojos, la voz, las manos, el corazón de María. No hemos de ver la Campaña como una práctica devocional, sino como un privilegiado medio y método de evangelización y transformación de las familias. El “paso” de lo devocional a lo evangelizador se da sólo en la medida que los misioneros y misioneras se preparan para ser “instrumentos de amor” en las manos de María. Si los misioneros se contentasen con sólo llevar a la Virgen de casa en casa, sería mucho pero no utilizaría todo el potencial evangelizador de la Virgen Peregrina. El misionero tiene que ser, he aquí su grandeza, portador de la Madre y el Hijo; como también los ojos, los oídos, las manos, la voz, el corazón de la Madre y el Hijo. Se trata de una verdadera Alianza de Amor: Los misioneros se ofrecen a María y María se ofrece a ellos, para evangelizar juntos, y así María vuelve a los caminos del mundo. Esto supone invertir más en los Misioneros, en su formación, su conciencia instrumental, su valor particular al realizar la tercera gracia del santuario (gracia del apostolado y el testimonio de vida) . Por eso la pregunta que me surge es: ¿cómo introducir más plenamente en la estrategia del Movimiento el carisma de Joao Pozzobon y la Campaña de la Virgen Peregrina?, ¿cómo ofrecer y desarrollar este don dentro de la estrategia del Papa para la Iglesia de hoy, “Iglesia de las nuevas playas”? Creo que las Familias nacionales y diocesanas tienen aquí una gran oportunidad.”

Misiones Familiares

Las misiones familiares surgen en Chile a mediados de los ’80 y llegan a México, San Luis Potosí el año 2008. El objetivo de la Misión es que la Iglesia -representada por las familias- pueda visitar los hogares y reencender la fe de la comunidad. Es una acción apostólica preparada, rezada y coordinada con los párrocos intentando dar respuesta a las necesidades concretas de la comunidad.

Se realizan distintas actividades: Talleres, Eucaristías, Posadas, Pastorelas, Obras de teatro, juegos para los niños, etc… Se comparte con la comunidad y se busca consolidarla.

La experiencia de misionar en familia es marcante. Asiste la familia completa junto a algunos amigos de los hijos. El grupo lo compone alrededor de unas 7 familias que viven todos juntos en la comunidad elegida. Se comparte internamente la alegría, los juegos, la espiritualidad, el servicio, la entrega y sobretodo la vida que el Señor y la Mater van suscitando durante toda la semana. Todos salimos fortalecidos en la fe y la familia.

Actualmente se realizan dos misiones familiares al año; adviento y verano.

 

Misiones juveniles – México Luz de María

México Luz de María es la respuesta concreta que queremos dar al tiempo actual, a México, a Dios. El Acta de fundación de Schoenstatt clarifica el camino y objetivo de nuestras misiones México Luz de María. Queremos entronizar a la Mater llevándola a los lugares que visitamos en nuestra patria para que así, a través de nosotros, instrumentos suyos, pueda repartir sus tesoros y gracias a todas la comunidades. El Acta de Fundación nos da la certeza de que nuestra misión es grande y por eso será herencia para las generaciones venideras.
De este modo, se trata de misiones juveniles que nacen hace más de 15 años. Los jóvenes de Schoenstatt de toda la República visitan distintas comunidades para compartir el Evangelio durante toda la Semana Santa y acompañar a la gente en sus celebraciones de los días santos. Participan unos 600 jóvenes entre 17 y 24 años. Visitan casas, enfermos, organizan las liturgias de Semana Santa, realizan talleres y animaciones en las comunidades. Es una experiencia juvenil llena de alegría, entrega, profundidad y compromiso.

LO PROPIO DE LA MISIÓN

Las misiones en Schoenstatt son un regalo que enciende corazones y mueve a cientos de jóvenes en distintas comunidades con un ideal: que México sea Luz de María.
La misión es, ante todo y como el nombre lo indica, un envío. Ser misionero es ser enviado, igual que Jesús en la tierra. En su oración al Padre, Jesús dice: “Como Tú me has enviado al mundo, yo también los envío al mundo”, él y la Mater nos llaman y nos eligen. Es cierto, somos elegidos, pero: “Hemos sido elegidos, no por ser mejores que los demás, pero sí porque nos pusimos a disposición un poco más que los otros.”
Somos misioneros de Schoenstatt
En el sentido más sencillo de la palabra, “Un misionero es un cristiano que desea salir de su lugar de residencia con el fin de ayudar al prójimo y evangelizar a la gente de otros sitios”. En primer lugar, ser misionero es “ser cristiano” y en segundo término acentúa dos elementos: ayudar y evangelizar. Como misionero de Schoenstatt nuestro principal objetivo es llevar a Cristo y el Evangelio a través de María. Llevamos a Cristo en el corazón con un sello mariano y con una espiritualidad específica que se basa en la alianza de amor con María, la santidad de la vida diaria y la Fe práctica en la Divina Providencia. Nos esforzamos por un estilo de vida mariano y auténtico, que desde “dentro” irradia una luz que compenetra nuestro alrededor.

EL SÍMBOLO

El contenido del símbolo recae en una llama que representa la Luz de María, de la cual se desprenden tres flamas, por Madre Tres Veces Admirable. Estas tres se surgen desde la llama central, la cual tiene el símbolo del santuario inscrito, centro y fuente de nuestra misión. El santuario está al centro de la llama, porque desde ahí somos enviados a ser Luz de María para nuestro México.
Las dos llamas que conforman el nivel final, representan unas manos, las manos del pueblo de México. Se incluye el color azul en una de las llamas de los extremos, para representar el manto de la Virgen y nuestra distinción como marianos.

ORACION DE MISIONES MÉXICO LUZ DE MARÍA

Querida Madre y Reina,
En Alianza, desde el Santuario,
queremos salir al encuentro de Cristo en nuestro México.


Ayúdanos a responder con heroísmo ha llamado del Padre,

a ser testimonios vivos de su misión.

Elígenos siempre como instrumentos fieles, alegres y apasionado
para hacer de tu tierra guadalupana:
México Luz de María.
Amén.

 

Pre-matrimoniales

El movimiento de Schoenstatt quiere comprometerse con la Iglesia y a la familia regalando algo de su experiencia en tema de familias. Es por ello que tanto en Querétaro como en San Luis Potosí se apoya a ambas diócesis con la preparación de novios para el matrimonio. Ello se realiza a la luz de las líneas diocesanas y de Iglesia (especialmente tomando la Exhortación Apostólica Amoris Laetitia), pero con la pedagogía de Schoenstatt. Se platican temas como la comunicación de los esposos, la sexualidad, la paternidad responsable, el sentido del sacramento del matrimonio, entre otros.

En Querétaro cuenta con la modalidad de un retiro de fin de semana junto al Santuario (más información: prematrimoniales.mta@gmail.com) y en San Luis Potosí el formato cuenta de varios encuentros tipo taller. (más información: prematrimoniales.slp@gmail.com).

 

 

Alianza México

Alianza México es un proyecto social encabezado por varios jovénes, algunos de los miembros son parte de la juventud de schoenstatt san luis. El objetivo es formar una alianza con jóvenes, profesionistas, instituciones y todo aquel con el deseo de generar un cambio positivo en el país. ¿Cómo ayudamos? Por medio de la creación de un centro comunitario donde se podrán impartir talleres, clases, cursos y diferentes actividades que buscan la formación integral y desarrollo de comunidades vulnerables trabajando en 5 pilares los cuales son Educacion, Desarrollo Económico, Salud, Cultura y Deporte. ¿Y tú cómo construyes un mejor México? ¡Sé parte de Alianza México!

CONTACTO:alianzamexico5@gmail.com
http://www.alianzamexico.mx/

 

Taller Altar Familiar: Para vivir en familia

OBJETIVOS DEL TALLERAyudar a formar familias fuertes para la Iglesia:
-Que teniendo como ejemplo e inspiración a la Sagrada Familia, puedan dar respuesta a la sociedad de hoy defendiendo los valores de la familia Conquistar en los hogares un espacio para un Altar Familiar que ayude a fomentar…
-Una mayor cercanía de la familia con Dios y la Virgen María
-La oración
-Mejores vínculos entre los miembros de la familia
-La misión de las familias de llegar a ser Iglesia doméstica – alma de una sociedad renovada
Fomentar el acercamiento de los Párrocos con sus feligreses y de los feligreses a su Parroquia
Atender el llamado del Papa Francisco de ser una Iglesia en salida – dar acompañamiento a otros

¿A QUIÉN VA DIRIGIDO ESTE TALLER?

Está abierto a todos los matrimonios
También se da acogimiento a parejas en unión libre que no hayan recibido el sacramento del matrimonio o bien que sean divorciados y vueltos a casar

¿CÓMO FUNCIONA?

Se forman grupos de 6 a 8 matrimonios.
Se asignan dos matrimonios guía a cada grupo.
Las reuniones de formación se llevan a cabo cada quince días por la noche.
Se congregan en la misma Parroquia (en alguno de los salones).
Sesiones de 60 a 90 minutos.
El Taller dura 8 meses, y se forma por dos ciclos de 4 meses cada uno (8 sesiones por ciclo).
Material de la catequesis: Libro “Fe y Vida Matrimonial” del P. Hernán Alessandri.
Cuota de recuperación de $350 (con posibilidad de buscar subsidio en caso necesario).

Contacto: altarfamiliarmexico@gmail.com

De Familia a Familia

El apostolado “De familia a familia” nace el año 2008. Surge de la inquietud de compartir con los más necesitados una cena digna de Navidad.

Durante el Adviento se invita a familias a regalar una despensa, un pollo asado y regalos personalizados para los miembros de cada familia (para ello se hace un catastro en las comunidades a través de la Parroquia). Además se les regala una imagen de la Mater y una liturgia para la Noche Buena.

La entrega se realiza el 23 de diciembre con una liturgia con villancicos y la hacen las mismas familias donantes a las familias que los recibirán. Todo termina con un hermoso convivio con tamales.

Actualmente se entregan cada año 450 despensas en San Luis Potosí.

 

 

 

Entrelazados

¿QUÉ ES ENTRELAZADOS?

ENTRELAZADOS* es una iniciativa apostólica que como agrupación civil nace del Movimiento  de Schoenstatt Monterrey en el 2010 y la cual ha tenido una permanencia continua en Nuevo León  por 6 años consecutivos hemos logrado tocar muchos corazones, pero el principal objetivo es el de apoyar aquellas familias desprotegidas que esperan lograr mejores condiciones de vida.

¿QUÉ HACE ENTRELAZADOS?

La principal ocupación y objetivo de nuestra agrupación es de llevar un programa EDUCATIVO  continuo a las familias, mediante diversos canales de seguimiento semanal, a través del año escolar.

ACTUALIDAD

En la actualidad trabajamos con 4 unidades de madres de familia, y esto  con un aproximado de 80-100  señoras y en 3 escuelas primarias con 600 niños aproximadamente. Trabajamos por la dignidad de las madres de familia y los niños, mediante temas de desarrollo humano y valores universales y programas de manualidades con el fin de proporcionar herramientas de sustentabilidad. Teniendo en mente siempre la idea de seguir creciendo de manera orgánica para poder llegar a ser permanentes en nuestra comunidad.

PEDAGOGIA

Nuestra labor está basada en la educación a través del amor con una búsqueda continua de enaltecer  los valores y fortalecer los vínculos familiares de las comunidades.